Me veo tirado en la playa,
pero yo ya no escucho el mar.
Cómo un muñeco de trapo,
descoyuntado sobre el arenal.
Con la luz del último amanecer,
mi alma es una cometa de papel.
Te veo desde la altura,
convertida en estatua de sal
entre cuerpos mojados,
amontonados por la mano del mar.
Te juré,
traerte a este lugar,
al Edén.
Bienvenida a playa Libertad.
Despiértate con esta luz mi amor
que los perros sólo le ladran al sol.
Resiste y te sacaré de aqui.
Tan sólo se trata de escapar,
al norte de playa Libertad.
En las noticias dijeron
que cruzásteis andando el mar.
Cómo Cristos negros
pero sin papeles, sin identidad.
En color,
la muerte tan natural,
es el horror,
que nos sirven con el postre.
Despiértate con esta luz mi amor
que los perros sólo le ladran al sol.
Resiste y te sacaré de aquí
Tan sólo se trata de escapar,
al norte de playa Libertad.
Al norte de playa Libertad, Miguel Ríos
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