IGUALDAD (DE OPORTUNIDADES)
Sito
Esta palabra o frase mas o menos estándar, le he escuchado varias veces a lo largo de la campaña electoral pasada e incluso ahora. Propia del pensamiento de izquierda.
Como muchos saben, llevo viviendo en Madrid seis meses atrás. Y como hay que buscarse el pan de cada día, he encontrado unas clases por las tardes para sacar las perrillas. A las cuatro de la tarde en un colegio, refuerzo general a niños de quinto de primaria. Luego a las cinco y media unas dos horas de clases particulares a una chica de cuarto de ESO, literatura e historia.
Pues bien, ahora vengo a relacionar términos. Aunque hay diferencia de edades en las dos clases de refuerzos, son jóvenes, solo les separa unos cuatro años. Pero vengo a incidir en la situación de cada uno. Por una parte está el colegio, que no digamos que esté entre una urbanización de adosados. Hay alumnos con verdaderos problemas y no me centro solo de notas. A algunos los padres les pega, el padre va y viene se su casa, viven la mayor parte de la semana de camino entre su casa y la casa de sus abuelos debido a las peleas de los padres, hay alumnos que están en manos de psicólogos,…y el problema o situación que me hizo pensar realmente en el sentido de igualdad (de oportunidades), es la de un chaval que me dice que en su casa viven unas diez personas. No me ha dicho si su casa es grande o no, pero eso sobra. Me sigue explicando sus tardes. Me comenta que vive con su madre y una tía, más toda la patulea de niños y sobrinos recogidos de un lado y de otro. Me relata que ayuda a la madre en tareas de la casa, a su hermana a hacer la tarea,… y él hace la tarea escolar en la mesa de la cocina debido a que materialmente no caben en los cuartos.
Hasta aquí una parte de la construcción. La otra parte recae en la chica de cuarto de ESO. Es hija única y sus padres trabajan los dos en bancos. Ella va a un colegio de pago. Me dice que almuerza en la casa de sus abuelos y luego se va a su casa, ve Fama y luego prepara las cosas hasta que yo llegue para las clases particulares de literatura e historia. Su casa es bastante espaciosa y tiene dos cuartos con amplias mesas y bien iluminados a su entera disposición. Pero ella, prefiere hacer la tarea en una mesa casi destartalada que tiene, curiosamente en la cocina. Me cuenta que ella no ayuda en casa, pues tienen una mujer para las tareas de la casa. Le gusta esquiar y pasar los fines en la casa que tienen en la sierra…
Esto me hace pensar que una de las palabras más hipócritas, que a mi entender, se pueden decir hoy día. Me refiero a lo de igualdad (de oportunidades). Hay mucha distancia entre las distintas oportunidades, hay mucha operación estética entre las posibles igualdades. No me creo eso de todos somos iguales. La única oportunidad nos viene muchas veces dada en el lugar donde nacemos.
Cuando hablo con los alumnos de quinto y les comento que la chica que le doy clases particulares va a esquiar en Semana Santa y en verano va a ir a Croacia, se quedan con la boca abierta (como yo). Así mismo, cuando nos sentamos en la mesa de la cocina y le cuento a dicha chica las desdichas que tienen los alumnos de quinto, me frunce el ceño. Mientras quizás, en ese mismo momento, el chico de quinto de primaria esté en la mesa de su cocina imaginando que esquía.
Esta palabra o frase mas o menos estándar, le he escuchado varias veces a lo largo de la campaña electoral pasada e incluso ahora. Propia del pensamiento de izquierda.
Como muchos saben, llevo viviendo en Madrid seis meses atrás. Y como hay que buscarse el pan de cada día, he encontrado unas clases por las tardes para sacar las perrillas. A las cuatro de la tarde en un colegio, refuerzo general a niños de quinto de primaria. Luego a las cinco y media unas dos horas de clases particulares a una chica de cuarto de ESO, literatura e historia.
Pues bien, ahora vengo a relacionar términos. Aunque hay diferencia de edades en las dos clases de refuerzos, son jóvenes, solo les separa unos cuatro años. Pero vengo a incidir en la situación de cada uno. Por una parte está el colegio, que no digamos que esté entre una urbanización de adosados. Hay alumnos con verdaderos problemas y no me centro solo de notas. A algunos los padres les pega, el padre va y viene se su casa, viven la mayor parte de la semana de camino entre su casa y la casa de sus abuelos debido a las peleas de los padres, hay alumnos que están en manos de psicólogos,…y el problema o situación que me hizo pensar realmente en el sentido de igualdad (de oportunidades), es la de un chaval que me dice que en su casa viven unas diez personas. No me ha dicho si su casa es grande o no, pero eso sobra. Me sigue explicando sus tardes. Me comenta que vive con su madre y una tía, más toda la patulea de niños y sobrinos recogidos de un lado y de otro. Me relata que ayuda a la madre en tareas de la casa, a su hermana a hacer la tarea,… y él hace la tarea escolar en la mesa de la cocina debido a que materialmente no caben en los cuartos.
Hasta aquí una parte de la construcción. La otra parte recae en la chica de cuarto de ESO. Es hija única y sus padres trabajan los dos en bancos. Ella va a un colegio de pago. Me dice que almuerza en la casa de sus abuelos y luego se va a su casa, ve Fama y luego prepara las cosas hasta que yo llegue para las clases particulares de literatura e historia. Su casa es bastante espaciosa y tiene dos cuartos con amplias mesas y bien iluminados a su entera disposición. Pero ella, prefiere hacer la tarea en una mesa casi destartalada que tiene, curiosamente en la cocina. Me cuenta que ella no ayuda en casa, pues tienen una mujer para las tareas de la casa. Le gusta esquiar y pasar los fines en la casa que tienen en la sierra…
Esto me hace pensar que una de las palabras más hipócritas, que a mi entender, se pueden decir hoy día. Me refiero a lo de igualdad (de oportunidades). Hay mucha distancia entre las distintas oportunidades, hay mucha operación estética entre las posibles igualdades. No me creo eso de todos somos iguales. La única oportunidad nos viene muchas veces dada en el lugar donde nacemos.
Cuando hablo con los alumnos de quinto y les comento que la chica que le doy clases particulares va a esquiar en Semana Santa y en verano va a ir a Croacia, se quedan con la boca abierta (como yo). Así mismo, cuando nos sentamos en la mesa de la cocina y le cuento a dicha chica las desdichas que tienen los alumnos de quinto, me frunce el ceño. Mientras quizás, en ese mismo momento, el chico de quinto de primaria esté en la mesa de su cocina imaginando que esquía.
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